martes, 22 de agosto de 2017

Vamos cerrando este capítulo/fractura

Ya ni me acuerdo del día en el que me hicieron esta última radiografía... Pero fue alegría total y absoluta no ver ni un trocito de la dichosa fractura.
Una de las cosas que debía asumir es las secuelas de la fractura y casi un año después puedo decir que son pocas o ya me he hecho a ellas.
Digo vamos cerrando este capítulo porque todavía me quedan dos pruebas para poder cerrarlo, pero me gustaría poder decir que todo lo que queda es normal después de la que me lié. Cuando me cogí el alta para empezar a trabajar había perdido la sensibilidad completa del anular y el meñique pero había que incorporarse sí o sí al trabajo y gracias a un fisioterapeuta maravilloso comencé a recuperarla, y de la seguridad social otra vez señores. 

Me escuchó como paciente, me escuchó como fisioterapeuta, me escuchó como madre y como deportista también. Se volcó en mis sensaciones y necesidades y me ayudó mucho más de lo que él se piensa. La liberación miofascial ha sido un gran descubrimiento, menuda llorera y alivio a la vez. 

Otra de las cosas que ha hecho que me recupere y que apenas queden secuelas es la bicicleta y tener un compañero loco de nuevas aventuras sobre ella. Le comenté a mi traumatólogo si se podía y me dijo si vas a hacer descenso lo mismo hasta esos microimpactos te vienen bien. Pues sí que vinieron bien.... Osifiqué lo que quedaba por cerrar, empecé a recuperar la fuerza y la sensibilidad. 

Así que poco a poco este brazo vuelve a ser mío pero yo no soy la misma. Porque bendita fractura. Pero eso es algo que ya contaré más adelante... 

viernes, 16 de diciembre de 2016

3 meses, palabra clave disciplina



Ya han pasado 3 meses desde que me hice la dichosa fracturita subcapital del húmero... Y en estos 3 meses la palabra clave ha sido disciplina, sumado a obediencia y paciencia.
Disciplina de no mover el brazo en el cabestrillo, disciplina de acudir religiosamente a todas las revisiones, disciplina de mentalizarse en cumplir a rajatabla todo lo que me decían y solo dos momentos de desobediencia total y absoluta ( a ver no soy una santa)
Y todo esto ha tenido resultados y estoy contenta. Cansada pero contenta de ver que poco a poco voy ganando movilidad, hoy mismo me he podido abrochar el sujetador como una persona normal y no haciendo aspavientos. (Eso lo he conseguido gracias a lo que hago en esas dos fotos, forzar la rotación interna tirando con el brazo bueno para que la mano suba, como dueleeeeeeeee) Contenta porque la constancia tiene sus ganancias, y contenta porque puedo decir que estoy cada vez mas cerca de alcanzar mi meta que es poder trabajar, que para eso una tiene vocación.
Ayer mismo miraba el primer vídeo que colgué donde prácticamente no puedo mover el brazo y me impresionó ver todo lo conseguido.
Perdón por haber tenido abandonado el blog, pero estaba centrada en la rehabilitación, súmale hora y media de rehabilitación y hora y media de gimnasio y tienes a una madre de familia muy ocupada, y es que esto me lo he tomado como un trabajo señores.
Siguiente paso, terminar de completar los rangos articulares y empezar a ganar fuerza. Hoy mantener un kilo y medio en alto con el codo extendido ha sido como sujetar el mundo entero, tengo agujetas hasta en las pestañas. Pero otra vez mi frase favorita, piano piano se llega lontano, y aunque parezca que corro no lo estoy haciendo, soy muy consciente de cada paso que doy, pisando fuerte para no hacerme daño.

Siguiente capítulo: Maneras de retorcerse en una camilla

P.D: Gracias, gracias, gracias por todos los ánimos, por el recupérate bien, por los elogios, por todos los que estáis a mi lado, por las broncas echadas (una en especial), por alentarme...

jueves, 17 de noviembre de 2016

Momento Camilla igual a dolor

Llega ese momentazo de poner mi hombro en manos de otra persona... Mi salud otra vez en manos de otro y me toca sí o sí confiar en que va a estar bien formada, que no me va a hacer daño, que no va a ser bruta, que va a tocar donde quiero que toque, donde necesito que toque y soy un puñetero saco de nervios.
Hace una semana y media comencé eso que llaman rehabilitación en las mutuas, y tristemente puedo decir que se nota cuando alguien tiene su salario asegurado independientemente de los resultados del tratamiento.
Pero esa es otra historia que ya contaré si consigo que mi enfado alcance límites normales, porque yo soy Fisioterapeuta y sé toooooodo lo que se podría añadir a mi tratamiento.Pero ahora soy paciente.
Las movilizaciones de un hombro que ha perdido todo su rango articular son dolorosas sí o sí y la Fisioterapeuta que me atiende es cuidadosa eso no se lo puedo negar, eso no quiere decir que no sea doloroso y que yo aguante lo indecible para que siga moviendo. Sé de sobra que no me voy a romper. La sensación es indescriptible, el notar que debajo de tu omóplato hay algo que te agarra con todas sus fuerzas para que no te muevas y que si mueves de más te provoca un dolor que te baja hasta la mano. 
De momento, estamos muy centradas en recuperar la flexión sin que la escápula se suba hasta mi garganta y la abducción. Las rotaciones son imposibles, siempre son lo último que se recupera en este tipo de lesiones. Yo iba muy ilusionada porque me notaba que movía mas y más pero claro compensaba hasta con las pestañas y en la camilla el movimiento puro de la articulación no ha alcanzado todo lo que yo pensaba que tenía.Así que un pasito atrás y centrarme en todo aquello que yo pueda hacer para mejorar.

Cuando me tumbo en la camilla me centro, respiro, pienso en todo lo que me dolió parir y la fractura, intento ser lo mas disciplinada posible, pero sé que acabo con los pelos revueltos, el labio mordido y con ganas de llorar. No puedo dejar de pensar en muchos de mis pacientes y en mis niños a los que tuve que someter a esta "tortura". Solo ha habido un día en el que el dolor ha dicho hasta aquí... Lo siguiente es empezar a llorar y he tenido que pedir a mi Fisio que parara. Es más intento estar con los ojos cerrados y no mirarla, pero el labio me delata. Creo que esto sólo lo va a entender aquellos que han sufrido este tipo de movilizaciones.

Podría explicar medio millón mas de cosas, pero esto hay que vivirlo, o mejor no... 

lunes, 14 de noviembre de 2016

Agua

Poco a poco,,, siempre mi frase, piano piano...
En el agua es donde más movilidad he recuperado, tanto que el médico me felicitó. En el agua te aseguras de que no hay golpes, de que no hay peso, de que la fractura no se va a reabrir...
Con la cabeza en el agua nadie ve mis muecas de dolor, porque insisto duele y mucho.
Me meto en el vaso de aprendizaje con mis abuelillas osteoporóticas y me animan, me piden que siga, me dicen tú puedes, se fijan en si hoy muevo mas que ayer.
Pero aunque duele, aunque tengo miedo, aunque los dedos no reaccionan cada vez estoy mas convencida de que ha sido la mejor inversión-decisión de mi vida como paciente.

martes, 8 de noviembre de 2016

Fractura consolidada


6 milímetros, han tardado 52 días en volver a juntarse. 52 días de espera, aguante, dolor intenso, dolor insoportable, dolor tolerable, pero siempre con dolor. Y todavía no se ha ido, pero ya está cerrada.
Y el hombro ha quedado según mi traumatólogo muy bien, yo miro la radiografía y dejo de ver la fractura y veo lo que es mi hombro ahora, un desastre que es mi desastre personal y donde hay que poner orden. Soy virgo y se me da bien ordenar las cosas.
Hoy hablaba con la madre de un paciente por teléfono y me decía es que hay que ver como evoluciona María y si llega a ser la misma, y ahora que soy un poquito más sabia, sólo un poquito, la he dicho no.
María no va a ser la misma porque ella ha tenido su lesión y eso ya hace que no pueda ser la de antes, sino que a ver dónde llega, que nos enseña su maravilloso cerebro que puede alcanzar, ahora es una nueva María y según se lo decía a ella me lo decía a mí misma. 
Este es tu nuevo hombro y de aquí en adelante te va a acompañar con esa cicatriz y una nueva movilidad que te la vas a tener que currar tú como María.
En el anterior post ponía que dudo mucho que vaya a recuperar el 100% y lo sigo pensando, yo con mis ojos de Fisioterapeuta y no de paciente veo mil taras en esa foto, mil defectos pero... Es mi hombro, mi nuevo hombro, la nueva Aurora y a ver dónde me lleva
Como paciente puedo decir que ya, ya está cerrada, ya no hay miedo a que se rompa cogiendo a mis hijas, ya puedo volver a abrazar con fuerza y barriga a barriga como a mí me gusta.Ya está consolidada.


viernes, 4 de noviembre de 2016

Poco a poco

El lunes 2 comencé mi andadura de autorehabilitación a la espera de comenzar en la mutua. Y no sólo recuperar el brazo sino el "fondo perdido". El primer día fue duro, bici, elíptica y piscina para realizar movilizaciones en el agua sin "dolor". Y poco a poco, piano, piano mi cuerpo responde.
Porque ya soy capaz de aguantar la flexión de hombro a 90º agarrando la bicicleta, y porque he recuperado el balanceo automático del brazo durante la marcha gracias a la media hora de elíptica.
Son pequeños pasos que están dando su fruto. Pero duele, duele y mucho.
Es un dolor raro, me gustaría poder hablar con medio millón de personas que hayan tenido fracturas como la mía, y hay momentos malos, de ¿esto se pasará? Supongo que sí, espero que sí, soy de las que se quejan poco... 
Pero aunque duele tengo la "linde" fijada y es recuperarme al máximo posible, y tristemente no creo que sea un 100%, pero bueno esa es otra historia que no sabemos si sucederá.
 

martes, 1 de noviembre de 2016

1 de noviembre del 2016, esto marcha.

Ya ha pasado una semana desde que me quitaron el cabestrillo, y por fin esta tarde me han llamado para comenzar la rehabilitación la semana que viene, pero en una semana he ganado bastante, yo solita. Los que me conocen saben bien que a fuerza de voluntad no me gana nadie...Hay que seguir adelante, aprender a levantarse y a tirar como se puede, como dice Manuel Carrasco.
Perdón por los caretos... Pero duele... Y las sombras en el brazo no son roña que conste, son restos del hematoma que todavía me dura después de más de 6 semanas.