domingo, 23 de octubre de 2016

¿Estamos locos o qué? Hablemos de higiene...

to do list...practice my karaoke. | Anja Rubik by Mario Sorrenti for Vogue Paris March 2013:       Bien, tú llegas al hospital con tu fracturita... Pero vienes de hacer deporte, y te ponen el cabestrillo sobre la ropa que llevas con la indicación total y absoluta de no mover el brazo en tres semanas. ¿Estamos locos o qué? Vale... Aceptamos barco porque me duele tanto que en estos momentos me da igual haber hecho lucha en el barro.

Pero digamos otra vez que no soy una buena paciente... Y esto fue un viernes por la noche y el domingo por la mañana ya estaba suplicando a mis ángeles para que me cambiaran de camiseta, por favor, por favor, por favor... Yo me lavo como los gatos pero esta camiseta me la quito sí o sí. Así que entre 3 personas y yo conseguimos cambiarla sin mover el brazo, pero ¡error! Mala elección... Licra que aprieta mas axila que se empieza a inflamar igual a estoy más incómoda que un cerdo en una charcutería.

Gracias a Dios o debido a mi incomodidad esa noche se me movió el cabestrillo, así que subimos al hospital de Guadalajara a pedir que me volvieran a colocar el brazo en su sitio y con un camiseta nueva dispuesta a volver a suplicar que me la cambiaran. Elegí mi camiseta de SK4L, por supuesto puesta del revés y accedieron a mis súplicas. Pero otra vez diciéndome que lo que elija va a acompañarme bien pegado al cuerpo 3 semanas. (Ummmmmmm, eso no se lo creen ni ellos).

Hablemos de higiene: si no puedo despegar el brazo me escuezo,si me escuezo estoy más incómoda, si intento no rozarme muevo el brazo, así que comenzamos las visitas a la farmacia. Pomada de bebes en la axila, que me doy con un cuidado pasmoso. LLegan los bultos... Pomada antitranspirante para no escocerme, crecen los bultos... Y por fin llega a mi vida ese maravilloso médico que me dice que voy a quedar bien y a la vez dice: "AGUA Y JABÓN" y yo añado "y cambio de camiseta" Música celestial para mis oídos.
No sé cómo lo voy a hacer, pero me voy a duchar!!!!!!!!!! No penséis mal, me estaba lavando, pero como las antiguas. 

Hablemos de higiene, la primera ducha fue la felicidad total, sin mover el brazo, con muchísimo cuidado, con ayuda. A día de hoy ya puedo hacerlo sola, sin mover un brazo, siempre pegado a mi cuerpo con ayuda de una cuerda que he puesto a la medida del cabestrillo. Pero señores médicos... Hay que plantearse muy requetebien lo de tres semanas con la misma camiseta.
Si eres hombre te ponen el cabestrillo sobre la piel y no pasa nada por llevar la camisa medio abierta, como he visto medio millón de veces a mi hermano; pero si eres mujer no puedes ir así por la calle, bueno o sí pero no estaría muy bien visto y lo mismo me hubieran multado. Porque señores yo no estoy loca, sino muy cuerda y 3 semanas con la misma camiseta me parece una cerdada. Me gustaría verles a ellos en mi lugar.

Así que desde ese día agua,jabón y cambio de camiseta. Y el humor cambia, el sentirte limpia te cambia el humor, y un buen humor también es parte de una buena recuperación.